Hay algunos que cada cuatro años se acuerdan de Vigo, hay quienes se acuerdan de Vigo cuando tienen algún interés personal o partidista, pero hay también vigueses, personas anonimas que han entregado toda su vida a su pueblo y sufren la desgracia de la ceguera de los gobiernos de turno y comen del hambre y la miseria por el abandono del Estado. Siempre lucharon por el bienestar de nuestra ciudad y morirán luchando fiel a la decencia y la honradez con que fueron formados por los hombres de antaño, fruto de una sociedad siempre leal y valerosa.
Nada mas lejos de aquellos personajes que con un estilo propio y personal de ambición pretenden seguir heredando el poder como si fuera de su propiedad.
La decencia e imparcialidad como una actitud del que respeta y cumple las normas de comportamiento social y moral dentro de una sociedad , esta muy lejos de la actitud de algunos gobernantes que piensan que todo lo que a ellos implica es eterno; pero también hay quienes como personas superiores que se creen, mirando sobre el hombro de sus conciudadanos y portando un cliché de “profesionales”, dicen tener el derecho de decidir el destino hacia nuestra desgracia.
La palabra honradez ya no existe en su diccionario hace mucho tiempo. La honradez es el modo de comportamiento del que cumple la ley, sin beneficiarse ni beneficiar a otros irregularmente, todo lo contrario de lo que hacen ellos. Algunos huyeron desde sus pueblos natales a la ciudad para formarse en la escuela de la corrupción, y desde el sillón de su despacho imparten las estrategias de cómo seguir vivendo del cuento con el dinero del pueblo sin ser descubiertos. Son “profesionales” del engaño, la falacia, la mentira y la corrupcion.
Se comparan con los honrados trabajadores del naval, de la construccion, que al atardecer regresan a casa empapados del sudor del trabajo. Que decencia han demostrado para tener ese “gran derecho”,cuando jamás reconocen que gracias a los obreros o a los campesinos, “esos hombres sucios analfabetos e incapaces”, pueden disfrutar de sus lujosas casas o encontrar en el mercado los productos con los que se alimentan a diario para mantenerse en vida. Dicen que en la universidad, en las aberturas de cursos politicos, congresos y mitines no les enseñaron eso, ¿de qué decencia hablan entonces?
Tambien afirman que los ciudadanos “no saben nada”, “solo saben pedir que arreglen su calle”, “solo saben protestar”, etc…. Puede que tengan razón, pero de lo que si estoy seguro es que el ciudadano es hábil y ha aprendido de esta crisis y sus consecuencias y tiene bien claro quien la ha provocado, quienes se han lucrado de ella y como saldremos de jodidos mejor que cualquier analista economico.
El engaño, la mentira y sobre todo la corrupcion, no es un fenomemo actual ni nuevo, este se manifestó en todos los tiempos y culturas en la historia de la humanidad….¿Acaso Judas no vendio a Jesus por unas monedas?, ¿Acaso G.Bush no mintio para invadir Irak?, ¿acaso decir que la globalizacion, la responsabilidad social, la democracia, la religion y la banca salvaran a la humanidad, no es decir una gran mentira?…en fin, desde siempre, la historia esta llena de mentirosos traidores y corruptos. Asi que, mi ciudad no es y no podra ser una isla mis queridos amigos, las islas estan enfrente, en Las Cies.
Nos guste o no, somos al mismo tiempo, origen y efecto de lo que nos pasa y que pasa en el mundo, en nuestra mano esta cambiar a tiempo, dar marcha atras a algunas cosas y tirar directamente a la basura los argumentos vacios y partidistas de los que nos han gobernado hasta ahora. Ese es el reto, de lo contrario, seguiremos usando el pasado y presente como un sofa, es decir, cagandonos en la madre que pario al resto del mundo pero bien acomodados.
Utilizemos el pasado y el presente, malo o bueno, como trampolin hacia el futuro.
Salud y suerte para todos….la vamos a necesitar.
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